CRISTINA KIRCHNER Y RODRIGUEZ ZAPATERO ACERCAN AL MERCOSUR Y LA UNION EUROPEA

Los presidentes coincidirán el primer semestre de 2010 al frente del Mercosur y de la Unión Europea. Quieren firmar el acuerdo comercial que quedó paralizado años atrás por las diferencias en cuanto a aranceles y protecciones.

[+] Mostrar esta Nota

Las oportunidades están para ser aprovechadas. En eso también están de acuerdo la presidenta Cristina Fernández y el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero. Porque el año próximo, además de recordarse el Bicentenario, CFK y Zapatero coincidirán en dos lugares claves. Como jefe del Ejecutivo español, Zapatero ocupará la presidencia de la Unión Europea. A su vez, la Presidenta argentina ocupará la presidencia pro témpore del Mercosur. La oportunidad que no quieren desperdiciar, sobre todo en una España aún afectada por la crisis económica, está pendiente desde hace diez años: la firma de un acuerdo comercial entre los dos bloques. “Queremos llegar a un acuerdo que viene demorado desde hace tiempo. Esta búsqueda tiene la edad del Mercosur, que se creó hace 23 años”, explicó Cristina Kirchner.

La decisión de aprovechar el 2010 para avanzar todo lo que sea posible en la integración de los dos bloques está tomada. Se lo pudo constatar en las dos tandas de reuniones que se sucedieron en los salones del Hotel Miragem. En el primer encuentro estuvieron los cuatro cancilleres del Mercosur más los de España y Portugal, Miguel Moratinos y Luis Amado, en representación de Europa. Luego llegó el turno de las bilaterales. Zapatero se entrevistó primero con Lula y acordaron que en mayo el español viaje a Brasil para participar de una conferencia sobre la Alianza de Civilizaciones. El jefe del Ejecutivo español se reunió luego con la Presidenta. En esa conversación también estuvieron la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega, los cancilleres Moratinos y Taiana, más el embajador argentino en Madrid, Carlos Bettini, y el secretario de Relaciones Económicas, Alfredo Chiaradía.

Con renovados ímpetus, Madrid transmitió a los socios mayores del Mercosur su disposición a avanzar en la suscripción de un acuerdo de libre comercio entre ambos bloques. Esa negociación está pendiente desde hace diez años. Comenzó en 1999, pero quedó en suspenso en 2004, cuando se constató que la Ronda de Doha organizada por la Organización Mundial del Comercio (OMC) no iba a poder completarse por culpa de los desacuerdos.

En la reunión con Cristina, Zapatero dijo que España iba a impulsar en la Unión Europea todas las medidas que fueran necesarias para facilitar un acuerdo con el Mercosur. Desde los intereses del bloque regional, el principal obstáculo para cualquier negociación con Europa fueron siempre las barreras arancelarias con las que suelen proteger y subsidiar su producción agropecuaria en el Viejo Continente. La propuesta de los españoles fue que las tratativas para suscribir un acuerdo puedan mostrar avances concretos en la inminente cumbre del Mercosur del 9 de diciembre. Ese día se podría anunciar “un programa ambicioso” de integración, según informó el vicecanciller brasileño, Antonio de Aguiar Patriota. Sin embargo, la fecha clave que están postulando los españoles es el 18 de mayo. Para ese día está previsto un encuentro de jefes de Estado de América latina y el Caribe con la Unión Europea. La cita es en Madrid. “Ese día empezamos la semana de mayo del Bicentenario”, recordó CFK.

La intención de Madrid fue analizada con mucha atención por la delegación argentina. La propia Presidenta reconoció que cualquier tratativa en ese sentido deberá encontrar la forma de sortear dos escollos: los aranceles europeos a las exportaciones agrícolas del Mercosur y las barreras impositivas de este lado del océano –y sobre todo de Argentina–, que se destinan a proteger la producción industrial local. “Tendremos que empezar por lo que estamos de acuerdo”, planteó la Presidenta. Le preguntaron entonces de qué manera se podía encontrar un acercamiento entre las posiciones. “Tendremos que pensar mecanismos de adaptación competitiva, compensaciones”, fue su respuesta.

Las preguntas, de rigor, se renuevan cada vez que la Presidenta mantiene una reunión con Zapatero. Pero ciertos antecedentes hacían que la consulta sobre la actualidad de las empresas españolas en la Argentina fuera obligada. Sobre todo a partir de la información que trasciende desde el gigante español Repsol, propietario de YPF, desde donde se ha deslizado que algunos de sus accionistas están impulsando la venta de las inversiones de la compañía en la Argentina. Además, como Página/12 informara hace diez días, el panorama de la petrolera ha estado motivando crecientes versiones sobre una nacionalización. Esos comentarios han surgido desde importantes funcionarios del Gobierno.

Ayer, en la conferencia de prensa posterior a su reunión con Zapatero, este diario le preguntó a la Presidenta si en esa conversación se había hablado de Repsol y de YPF. “En absoluto. No se tocó ninguna otra cuestión que no sea lo que les dije”, respondió CFK. “Lo puede confirmar el embajador”, agregó. Sentado en un sillón al costado de CFK, Carlos Bettini se limitó a hacer un mínimo gesto afirmativo.


Rechazo por las Malvinas

El Gobierno afirmó mediante un comunicado de la Cancillería su “enérgico rechazo a la pretensión de considerar a las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y al Sector Antártico Argentino, como territorios asociados a la Unión Europea”. La Cancillería instruyó además a su embajada ante la UE y a las representaciones ante los 27 Estados miembros de la Unión para que “presenten notas de protesta ante las respectivas autoridades rechazando” esta pretensión de considerar a las Malvinas y al territorio antártico como asociados al bloque del Viejo Continente. La reacción se produce como consecuencia de la entrada en vigor a partir de hoy del Tratado de Lisboa, que modifica el Tratado Constitutivo de la Comunidad Europea y el Tratado de la Unión Europea. El comunicado sostiene que “la inclusión en el listado de territorios asociados del pretendido ‘Territorio Antártico Británico’, que la Argentina no reconoce, en nada afecta los derechos de nuestro país sobre el Sector Antártico Argentino.


Nota Original: http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/subnotas/136255-43895-2009-12-01.html

0 Responses to "“Queremos llegar a un acuerdo”"

Leave a Reply