LAS ULTIMAS ENCUESTAS DE LA PROVINCIA, LA CAPITAL Y LOS PRINCIPALES DISTRITOS
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Casi todos los consultores –con la excepción de Poliarquía– consideran que el dúo Néstor Kirchner-Daniel Scioli está ampliando su ventaja en la provincia de Buenos Aires. Hay al menos dos encuestadores que incluso hablan de que podría haber diez puntos de diferencia. El diagnóstico es que el binomio Francisco de Narváez-Felipe Solá se estancó y que crece algo la lista de Margarita Stolbizer-Ricardo Alfonsín. En la Capital, Hugo Haime terminó ayer una encuesta en la que afirma que gana Gabriela Michetti, del PRO, pero que hay un triple empate en el segundo puesto entre Prat Gay (Encuentro Cívico y Social), Carlos Heller (FPV) y Pino Solanas (Proyecto Sur). Los demás consultores coinciden en que está primera Michetti, pero ubican claramente en el segundo lugar a Prat Gay. El diagnóstico se completa con claras ventajas para Luis Juez en Córdoba, una elección favorable pero con menos distancia de la pensada para Carlos Reutemann en Santa Fe, con el socialista Rubén Giustiniani acercándose, y una ventaja del radicalismo, apoyado por Julio Cobos, en Mendoza, pero también con menos luz de lo esperado.
Página/12 reunió las opiniones de Hugo Haime, de Haime y Asociados; Artemio López, de Equis, Sergio Berenztein, de Poliarquía; Enrique Zuleta Puceiro, de OPSM; Roberto Bacman, del CEOP; Ricardo Rouvier de Rouvier y Asociados Analía Del Franco, de Analogías y Heriberto Muraro, de Telesurvey.
1 ¿Cuál es su análisis sobre la provincia de Buenos Aires?
Analía Del Franco: Desde la oficialización de las listas, que de alguna manera es el lanzamiento formal de la campaña electoral, las mediciones muestran un cambio. A partir de ese momento el oficialismo aumenta la brecha que meses atrás mantenía con la lista de Unión Pro. Una de las principales razones que llevan a este despegue es el propio ordenamiento y nombramiento de Kirchner como candidato. Antes los mensajes eran poco claros, se agrega el trabajo de base en los distritos, ya con un definido cabeza de lista, comienzan a hacer foco en un eje de campaña y finalmente surge un Kirchner que vuelve a captar adhesiones, más persuasivo que confrontativo, eludiendo el estilo que tanto enoja a los sectores medios. Desde ya también habría que contabilizar debilidades expuestas por los adversarios, básicamente Unión Pro, que de haber mantenido ejes claros de discurso y buen posicionamiento, ha pasado a cristalizar los problemas de una alianza de corte electoralista. El Acuerdo Cívico Social mantiene su predominio y tracción de preferencias, en especial en el interior de la provincia. Observando al electorado, el target estrella de esta campaña son los sectores medios bajos.
Sergio Berenztein: Hay una situación de paridad entre las listas encabezadas por Kirchner y De Narváez, con una leve ventaja a favor del oficialismo. El Acuerdo Cívico y Social se encuentra en tercer lugar, a una distancia nada fácil de remontar, sobre todo frente a dos campañas con tanto despliegue de recursos.
Hugo Haime: La elección tuvo varias etapas. La primera hasta la definición de las candidaturas oficiales, cuando FPV y Unión Pro estaban muy parejas. Era el momento en que De Narváez/Solá aparecían como una alternativa que podía ser sólida. Hay un segundo momento, que es el de la muerte de Alfonsín, en que la Acuerdo Cívico y Social crece y triplica su caudal. Actualmente transitamos una etapa de consolidación del voto oficialista. sobre todo en el conurbano bonaerense, mientras que tienden a emparejarse las cosas en el interior. En el Conurbano, parece estar rompiéndose a favor de Kirchner la situación de empate en el primer cordón y hay claras ventajas del ex presidente en el segundo cordón. El replanteo de la campaña oficial, que pasó de tremendizar las cosas a hablar del futuro y de las cosas de la vida cotidiana que realmente le importan al electorado, más el armado de una estructura territorial en donde todos suman, y los errores estratégicos de campaña de Unión Pro (una campaña comunicacional sin sustento político, un armado territorial débil, una estrategia política errática, peleas internas), ponen hoy la situación en términos de saber no quién va ha ganar sino cuán cerca de los diez puntos de diferencia habrá entre Kirchner y De Narváez.
Ricardo Rouvier: Se va manifestando una ventaja del kirchnerismo sobre el pro-peronismo y el Acuerdo Cívico y Social, que se ubica en tercer lugar. La evolución muestra cómo se va consolidando el voto duro del conurbano a favor del oficialismo, que incide fuertemente en el promedio provincial. Por el momento tenemos una diferencia importante entre el primero y el segundo, restando medir algunas secciones electorales del interior, que pueden recortar las distancias pero sin cambiar las posiciones.
Enrique Zuleta Puceiro: Las tendencias se han estabilizado en niveles muy similares a los de los últimos dos meses. Kirchner recuperó su ventaja inicial sobre De Narváez. El 32,5 a 25,4 por ciento actual puede ampliarse a diez puntos en la medida en que sobre el final el oficialismo logre imponer su amplia ventaja logística en el segundo cordón bonaerense. Sobre todo si se tiene en cuenta que Stolbizer avanzó a un 22,9 por ciento, tres menos que el peronismo disidente. Un 12 por ciento de indecisos, sumado a una elección muy competitiva, permite suponer un final cerrado. Kirchner mostró control de la agenda electoral y superioridad estratégica. Las contradicciones internas del frente disidente, sus dificultades para avanzar sobre el electorado peronista y el techo marcado por el ascenso del voto no peronista, sitúan a De Narváez en una meseta inhóspita y difícil de superar. Kirchner extiende su ventaja a diez puntos en el primer cordón y quince puntos en el segundo, lo cual neutraliza el voto del interior, favorable por estrecho margen a De Narváez.
Roberto Bacman: El Frente para la Victoria, proyectando su intención de voto (sin negativos ni indecisos), redondea un 37,9. De este modo consolida su ventaja, que llega a ser de casi diez puntos sobre Unión PRO. Si se tiene en cuenta la evolución de la intención de voto, especialmente a partir de marzo, es posible detectar que el oficialismo se mantiene firme, incluso con una tendencia al crecimiento; que el frente liderado por De Narváez parece haberse estancado desde principios de mayo, con el agravante del reciente lanzamiento de la candidatura de Luis Patti, que comenzó a crecer dentro del perfil de sus propios votantes, y que el Acuerdo Cívico y Social arrancó con alrededor de 10 por ciento y ya proyecta a casi un 24.
2 ¿Cómo ve la Capital? ¿Observa cambios en los últimos tiempos?
Haime: Cerramos ayer mismo y hay datos llamativos. La evolución del voto muestra a Michetti liderando con cerca de 30 puntos y un segundo lugar en disputa entre Prat Gay, Heller y Pino Solanas. Esta es una novedad de los últimos días. Mientras el Pro se mantiene estable, tendiendo a ubicarse cercano a lo obtenido por Macri en 2005, el Encuentro Cívico y Social no arranca y los crecimientos los encontramos en Heller y Solanas. El primero básicamente a expensas de Ibarra, el segundo a expensas de los votos de fuerzas de izquierda. Claro que en la Capital nada está dicho hasta la última semana, que es cuando los porteños se meten en la elección.
López: Michetti está en una meseta mientras tiende a crecer el Acuerdo Cívico y Social. Antes de incorporarse Carrió a la lista, el PRO duplicaba en intención de voto al Acuerdo. Pero la distancia se estrechó paulatina pero sistemáticamente hasta ocho puntos. El PRO 36 por ciento, el Acuerdo 28, Solanas 13,5, Heller 11,6 e Ibarra 7. Hay un 10 de indecisos.
Del Franco: Si bien se mantiene el primer lugar para Michetti, se presenta en “meseta”, en la que no parece estar captando o recaptando votantes PRO 2007. El segundo lugar, que hasta hace un mes era disputado por varias listas, hoy es de Prat Gay con holgura. El tercer lugar es el que está en disputa en este momento, entre Solanas y Heller. El target estrella de esta campaña parecen ser los jóvenes.
Rouvier: El electorado porteño está ratificando el dominio del macrismo, aunque Michetti está por debajo de la performance de primera vuelta de Macri en 2007. Unión Pro tiene un proyectado de 34/35 por ciento. Luego se ubica el Acuerdo Cívico y Social, a unos ocho puntos de distancia. Tercero tenemos a Heller, seguido muy de cerca por Solanas y luego por un Ibarra que se debilita electoralmente. Este espacio progresista, que representa entre el 25 y el 30 por ciento del electorado, divide sus votos y los obliga a competir entre ellos.
Berenztein: La situación en Capital se encuentra estable, con el PRO liderando cómodamente, seguido por el ACyS. Hay una fuerte competencia en el espacio tradicionalmente progresista, donde disputan el voto Solanas, Ibarra, Heller, y más atrás el socialismo.
3 ¿Cómo observa otros distritos?
Zuleta: El rasgo más importante es la refederalización de la contienda. A una primera fase, en la que Kirchner logró imprimir una agenda nacional centrada alrededor de la idea de un plebiscito nacional, parece haber seguido una segunda de neta primacía de temas, candidaturas y conflictos provinciales. Lo que se plebiscita en cada provincia es el gobierno local. No por ello pierde importancia la idea de plebiscito nacional que el control de la agenda por parte de Kirchner logra consolidar. Ello es muy claro en los principales distritos. En general, los gobernadores de uno u otro signo tienden a imponer su ventaja territorial. El panorama dista, sin embargo, de ser uniforme. En Córdoba, el gobierno local cosecha en la elección de senador un magro 15,1, frente al 40,1 de Juez, 16,6 de la UCR y 10,5 de Acastello, candidato del oficialismo nacional. Santa Fe exhibe un acortamiento importante de las distancias con que partió Reutemann. Las diferencias sobre Ruben Giustiniani se han reducido a 41 a 34,5, al tiempo que Claudio Leoni, candidato del FPV, cosecha un magro 11,6. Otro distrito de importancia es Mendoza, donde se eligen también senadores y donde el involucramiento directo en la campaña de Julio Cobos agrega connotaciones nacionales a atender. Allí Ernesto Sanz, asistido por Cobos, alcanza 30,4, sobre un 18,7 del candidato oficial.
Del Franco: En la mayoría de los distritos se tiende a revalidar la gestión de los gobernadores, ya que el discurso local y la garantía de estos referentes pesa mucho. Hay situaciones más complejas, como las de Córdoba y Santa Fe. Otras más obvias, como Chubut, en la que el alto nivel de aprobación del gobernador tracciona votos. Y hay situaciones originales, como la de Mendoza, con la presencia de Cobos.
Berenztein: Es importante seguir de cerca a Santa Fe, pues la ventaja de Reutemann es más acotada de lo que muchos suponían. El interrogante, de confirmarse esta tendencia, es si Lole ratificará el 28 sus credenciales de presidenciable, canalizando las esperanzas de muchos gobernadores y dirigentes peronistas del interior que quieren avanzar hacia un período post K. También es importante monitorear los casos de Mendoza y Corrientes, pues una mala elección en esos distritos implicaría que el oficialismo corre el riesgo de perder el quórum también en el Senado.
Nota Original: http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-125890-2009-05-31.html
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